¿Qué hacen un francés, un italiano y un español en una cocina? Pues un risotto. Me refiero a quesos, claro. Para este plato tan tradicional del norte de Italia he usado un Comté frances, Parmesano italiano y un queso de nata de Cantabria. Los tipos de quesos pueden ser los que vosotros prefiráis. Además lleva setas. Concretamente níscalos. Vamos allá con los ingredientes para 4 personas:
- 400 gramos de arroz carnaroli (el más adecuado para risottos)
- 1 litro de caldo de verduras (hecho por vosotros o de brick, si no tenéis tiempo)
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 trozo de apio
- 1/2 vaso de vino blanco (Manzanilla, si puede ser)
- 100 grms. de queso parmesano
- 100 grms. de queso comté
- 100 grms. de queso de nata
- 250 grms. de níscalos
- 50 grms. de mantequilla
- sal y pimienta
- cúrcuma molida
En una cazuela ponemos un poco de aceite de oliva virgen extra y la mitad de la mantequilla. Esperamos que se funda y añadimos el ajo y la cebolla picados. Cuando dore un poco, añadimos el apio cortado fino y los níscalos, bien limpios y troceados. Recordad que las setas nunca se limpian con agua, sino con un pincel o brocha. En seco.
Echamos el arroz y marcamos durante 1 minuto en seco, removiendo sin parar. Añadimos el vino blanco y dejamos evaporar el alcohol durante un par de minutos, a fuego fuerte.
Bajamos el fuego un poco y añadimos sal y pimienta y vamos incorporando el caldo poco a poco. Recordad que debemos echarlo caliente y no frío. No seguiremos mientras el arroz no absorba bien el líquido. Removed con frecuencia para que el arroz suelte el almidón. Cuando nos quede medio litro de caldo por echar, añadimos la mitad de los quesos, para que se vayan integrando poco a poco.
Justo antes de terminar (en total se tardan unos 18 minutos en conseguir un grano perfecto), añadimos el resto de los quesos y la mantequilla que nos quedaba. Incorporamos una cucharadita de cúrcuma molida y rectificamos la sal si es necesario.
Sabréis que tenéis la textura ideal cuando metáis la cuchara y os quede un arroz cremoso pero no pegajoso.