Me gustan los platos de cuchara incluso cuando empieza a hacer calor. Estos judiones son vegetarianos. No llevan nada de carne. Si esto os parece una aberración de la naturaleza, tenéis permiso para «dejar caer» un chorizo, un pedazo de panceta y un trozo de morcilla.
Ingredientes para 8:
- 500 grms de judiones
- 1 zanahoria
- 1 cebolla
- 4 dientes de ajo
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- dos cucharaditas de pimentón agridulce
- una pizca de chile seco en copos
- 2 hojas de laurel
Lo primero es poner los judiones a remojar, bien cubiertas de agua. Las debéis tener como mínimo desde la noche anterior.
Desechamos el agua de remojo y los ponemos en una olla, cubriéndolas de agua hasta un dedo por encima. Ponemos la olla a fuego alto. Mientras levanta el hervor, echamos la zanahoria, la cebolla pelada y entera y los dientes de ajo con su piel (que luego quitaremos). Echamos también las hojas de laurel y un puñado de sal.
Cuando hierva el agua, echamos un chorro de aceite de oliva. Llega el momento de «asustar» a las fabes. Echamos un poco de agua fría dentro de la olla. Veremos que se corta el hervor de repente. Esto hace que las fabes queden más tersas y que no se nos rompan tanto. Seguimos con el guiso a fuego medio. Que no hierva a borbotones. Así tienen que estar entre 2 horas y 2 horas y media. Si lo hacéis en olla rápida tenéis que poner la tapa y cuando salga vapor por la válvula, bajar el fuego. En 50 minutos estará listo.

Una vez podamos abrir la olla, sacamos la cebolla, la zanahoria y los ajos (sin la piel), y lo metemos todo en el vaso de la batidora, junto con algunos judiones y un poco del caldo. Batimos bien y volvemos a echar a la olla. Esto hará que el caldo espese y quede cremoso. Si pasado el tiempo necesario aún están un poco duros, dejad la olla a fuego medio 20 minutos más. Y si lo coméis al día siguiente, no os digo «na».